El terremoto sacude a las bolsas mundiales

El devastador terremoto sufrido en Japón el pasado viernes día 11 ha dejado distintas secuelas, primero la humana con varios miles de muertos originados especialmente por el gran Tsunami que asoló las islas y después el grave riesgo nuclear generado por verse afectados varios reactores nucleares con emisiones de material radiactivo a la atmósfera.

Tras la primera y segunda secuela, debemos contemplar en esta sección para el “pequeño inversor” como el terremoto sacude a las bolsas mundiales, ya que en este mundo globalizado en el que vivimos, una catástrofe en la tercera potencia económica mundial, lógicamente tiene una gran repercusión a nivel bursátil y todos los mercados se ven afectados en sus índices.

El impacto económico centra la atención de los inversores. El enorme gasto que se necesita para recuperar las infraestructuras y su industria se convierte en un “lastre” que durante unos años dificultará el crecimiento del endeudado país nipón y por consiguiente afectará al crecimiento mundial.

El Gobierno Japonés, deberá crear un fuerte consenso con la Oposición política para aprobar un presupuesto complementario que pueda compensar el negativo impacto económico generado tras la catástrofe que afecta a servicios públicos, transporte y plantas de fabricación que permanecen cerradas de manera temporal.

El Banco de Japón se ha comprometido a garantizar la estabilidad de los mercados financieros con un fuerte aporte de liquidez en los primeros días de negociación, lo que no ha evitado una gran caída de los índices bursátiles con grandes recortes en las cotizaciones de sus “gigantes multinacionales”(ver artículos “El mayor mercado del mundo”y “Las nucleares en el mercado”).

DATOS:

La situación de los mercados financieros y de bolsa tras los graves acontecimientos ocurridos en Japón son los siguientes:

  • El yen en los primeros días de cambios con el dólar había bajado de los 83,00$ a 76,00$ para posteriormente recuperar la cota de los 80,00$.
  • El índice de referencia de la Bolsa de Tokio es el Nikkei 225, veamos su gráfico:

Descenso desde los 10.450 puntos hasta los 8.200 puntos(-2.250 puntos)

  • El importante índice Dow Jones Industrial Average de la Bolsa de Nueva York refleja la bajada siguiente:

Desde 12.100 puntos al soporte de los 11.700 puntos (-400 puntos)

  • Por último nuestro Ibex35 de la Bolsa de Madrid ha reaccionado con la caída siguiente:

Bajada desde los 10.628 puntos hasta los 10.076 puntos. (-552 puntos)

COMENTARIO:

Siempre tras una gran catástrofe natural o generada por los humanos, viene una recuperación, así ha sido desde hace muchos años y siglos desde las hambrunas en Europa, La Peste del Medievo, Primera Guerra Mundial, la Segunda, Guerra Fría, Crisis de los misiles en Cuba, Crisis del Petróleo y demás guerras en zonas “delicadas” del planeta, todo ha sido superado cuando parecía ser el fin del estado del bienestar e incluso llevado al extremo, cuando no, se trataba de la simple supervivencia física de los ciudadanos del planeta.

La tecnología actual que tanto nos sirve para alcanzar grandes cotas de calidad de vida sobre el resto de las especies con las que convivimos, nos lleva a veces al “precipicio del desastre” ya sea vía nuclear, bacteriológica etc. Debemos equilibrar la balanza entre su evidente utilidad y los riesgos que asumimos por utilizarla.

CONSEJOS:

Las bolsas se volverán a recuperar (más pronto que tarde), y Japón necesitará ayuda internacional en la reconstrucción de los daños causados, lo que va a generar trabajo e ingresos para muchas empresas internacionales especializadas en los distintos sectores de la economía.

Recordemos que en momentos tan desgraciados, como el actual, la actividad financiera mundial continúa y la compra de las “gangas”en el mercado bursátil va a empezar (si no ha comenzado ya). Esto no deja de ser un ciclo que se repite de manera constante (hasta ahora) y que “las manos fuertes” sabrán utilizar convenientemente en su provecho.

La frase elegida para el día de hoy dice así: «La prosperidad no existe sin temores ni disgustos, ni la adversidad sin consuelos y esperanzas», Francis Bacon .

Nosotros con la “esperanza” en un futuro mejor, seguiremos informando y aconsejando a personas como usted, será otro día.

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