Convertirse en accionista de bolsa

Tras una decisión madurada por parte del inversor y una vez meditados muchos factores, se puede llegar a la situación de convertirse en accionista de bolsa.

En este artículo  –siempre en lenguaje coloquial – vamos a recordar algunas de las gestiones necesarias a considerar para iniciar una inversión en acciones, estas son:

1. Tipo de inversión: Puede ser de diversos tipos – corto, medio y largo plazo -.
2. Perfil del inversor: Conservador o arriesgado.
3. Capital a invertir: Siempre previo análisis de sus ahorros y necesidades.
4. Intermediarios financieros: Son los denominados brokers, que cobrando una comisión, ejecutan las órdenes en los mercados. Los tres tipos de intermediarios financieros son: Entidades de crédito, Sociedades de Valores y Bolsa y Agencias de Valores y Bolsas (para inversión de largo plazo sin grandes movimientos, la opción de bancos o cajas puede ser más apropiada o cómoda).
5. Comparar comisiones: Las comisiones varían en cada Entidad de crédito, Sociedad o Agencia cada vez que se compra o vende, por ejemplo: porcentaje de intermediación, custodia de los títulos, traspaso, canon de bolsa y canon de liquidación.
6. Abrir una cartera de valores: Es como una cuenta que no contiene dinero, solo contiene títulos (acciones) donde se “apuntan” las compras, ventas y dividendos, de los mismos. El efectivo se maneja desde una cuenta “normal” asociada a la cartera.
7. Desconfiar de los “chiringuitos financieros”: Especial cuidado deben tener los inversores noveles con estas empresas o entramados, que utilizan campañas de oferta garantizada de grandes rentabilidades y operan sin licencia de la C.N.M.V (organismo encargado de supervisar el mercado de valores).
8. Envío de ordenes al broker: Por último, a través de distintas vías de comunicación ( telefónica, Internet etc.) se envían las ordenes al broker que ejecutará las instrucciones recibidas por parte de su cliente. Existe la posibilidad de manejar plataformas virtuales donde el propio inversor señala el momento de compra y venta – trading ofrecidas por el broker elegido.

Consejos: La inversión en bolsa para un “novato”, puede llegar a ser al principio emocionalmente intensa, ya que suele hacer un seguimiento día a día del valor e incluso – minuto a minuto – con lo que ello conlleva, de gran alegría en las subidas y enorme decepción en las bajadas. Se puede pasar de ser un “mago” de las finanzas, a horas después, pensar que se es un “torpe”por haber realizado dicha inversión.

Bien, el tiempo y la experiencia, consiguen atemperar los ánimos y soportar mejor la “tensión” que produce en el inversor la actividad bursátil. Para el “pequeño inversor”, el consejo principal es iniciarse en el largo plazo en valores de gran capitalización, ya que el paso de las sesiones en la bolsa, suele corregir las grandes oscilaciones de precios que ocasionan determinados momentos de incertidumbre o crisis.
En esta fecha, recordemos la frase que dice así: «Entre la avaricia y la prodigalidad está la economía, y es la virtud que debe practicar todo hombre», Paolo Mantegazza.

Nosotros seguiremos hablando de “economía” en este rincón …será otro día.

One Response to “Convertirse en accionista de bolsa”

  1. ever tarifa ramirez

    trabajar con todos

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